Presentamos una selección de poemas de Jorge Orendáin (Guadalajara, Jalisco, 1967). Poeta y editor. Estudió la licenciatura de Ciencias de la Comunicación en el ITESO y la maestría de Literaturas del Siglo XX en la Universidad de Guadalajara. Fue subdirector de la revista Trashumancia y formó parte del consejo editorial de las revistas Luvina, Reverso y del diario Milenio Jalisco. Es autor de Animalías (1994), Telescopios de papel (1996), Por demás la lluvia (1996), Ciudad a cuatro ríos (1999), Si la pausa (2008), Patio exterior (2008), Marpa (2014) y Respirar sombra (2019). Actualmente trabaja en la Editorial Universitaria de la Universidad de Guadalajara, coordina el taller de poesía de la SOGEM y dirige la editorial La Zonámbula.
Ser todas las voces
Descubrir el sonido y darle nombre,
al nombre silenciarlo con palabras.
Decir que somos aire entretejido
en todo silencio de la ciudad.
Dividir el tiempo de nuestra vida,
alimentarnos de fuego las manos,
ser espacio del viaje, reír siempre,
llenarse de nombres y ser espejo,
ser otro dios, redescubrir el mundo,
beber de todos los mares la lluvia,
ser casa, río, pradera, tristeza.
Destender el pensamiento, escuchar,
ser todas las voces del universo.
Vaso con sed
Escribo un vaso
con la sed en los ojos
Digo agua y despierto
digo sol y respiro
Escribo el mar
con una gota de lluvia
Soy agua y tengo sed
Llave de vida
I have a key
so I open the door and walk in.
It is dark and I walk in.
It is darker and I walk in.
Mark Strand
La vida es una llave oscura.
La llave abre la oscuridad de la vida.
La oscuridad es una llave para salir de la vida.
Todos abrimos la puerta con una llave oscura.
La llave oscura no abre ventanas.
Las ventanas no tienen oscuridad.
La oscuridad es una ventana para morir.
Pero todos entramos a lo más oscuro.
Lo oscuro es para todos,
es la claridad que nos abre puertas.
La claridad es oscura,
abre puertas sin llaves.
La llave es una ventana
donde miramos puertas cerradas.
La puerta es una llave para mirar ventanas.
La ventana es una puerta oscura.
La puerta oscura es nuestra ventana.
Nido
De tanto mirar al árbol
fui árbol un instante.
Me queda un nido de pájaros
para recordar.