Presentamos seis poemas de Roger Santiváñez. Él nació en Piura, costa norte del Perú. Estudió literatura en la Universidad de San Marcos de Lima y obtuvo un doctorado en Temple University. Participó en La sagrada familia (1977), militó en Hora Zero (1981) y fundó el Movimiento Kloaka (1982). Su más reciente publicación es Santa Rosa de Lima [Dharma Books, México 2021]. Trabajó más de 20 años en instituciones de los Estados Unidos como Princeton University, Bennington College, Drexell University, entre otras. Vive a las orillas del río Cooper, sur de New Jersey íntegramente dedicado a la contemplación y a la poesía. Su libro El sentido de la soledad. Memorias (1961-2001) sale en Lima bajo el sello de Penguin Random House del Perú este mes de noviembre. La serie que aquí se ofrece pertenece a un libro en preparación.
NUOVA MESSA
1
El aire tiene la suavidad
De tu cuerpo cuando sueño
Con él divagando por la orilla
Se irisa el viento entre la
Húmeda yerba, cae la lluvia
& lava la soledad enardecida
El frío todo lo abarca ahora
Habrá un rocío guarda el
Amanecer surcará el arco iris
& entre los cipreses se oyó
El silvestre surtidor de sico
Moros donde tú me sonreías
2
El mar elevado sobre los tumbos
& las tumbas del cielo forman
Ventanas colmadas de la más
Hermosa flor reinando aún en
Ese reino tan oscuro donde
Luna se diseña sola en su es
Plendor & es el pasto extendido
En su frescor caricia de tus
Muslos alhelíes por el pistilo
Rociado en tu cabello al
Mirarme esta canción
Un incendio forestal dicha
Beatitud en el centro de
Tu frente delicada igual
La blusa que el viento corta
& exhibe -callada- el secreto
De esta poesía
3
Quiero decirte cuánto me gustas
Se enciende el campo de azucenas
Se diseña mi sueño nocturno con
Tigo se marcha el día a su sarcófago
El verano aproxima las flores que
Te poseen a la primitiva luz amanecer
Tenías los párpados sombreados por
La rareza de ser la última noche
Muslos encantados trazo que depura
Un lecho de leche elasticidad de un
Susurro silencioso como el estallido
De la bomba del corazón & flor
En estambres dispersados caderas en
Vueltas con distinta ropa íntima enlaza
Fruto primaveral por la dulzura delicia
Delicada de tu conchita rosada inma
Culeada rizoma del aroma nascita
De ti misma siempre enamorada.
4
La bondad es la poesía que de ti nace
Sobre el césped donde el surtidor
Alcanza fuegos soñados en tus pen
Samientos & la belleza que hubimos de
Amar concentrada en tus cabellos en
Volviendo amaneceres como pasto de sábanas
Frescas donde nos tendimos para hacer el
Amor deslumbrados ante la perfección de
Tu forma pétalos tocantes a la re
Flexión del silencio pleno de caricias
Que resplandecen en el dorado acopla
Miento amada con pasión delicu
Escente germina el confite en al
Borozo recrea este poema magnolia
Jamás oscurecida esa cintura tuya
Fragilidad de nuestros nombres hen
Didos con tu humedad porque había
Un candor hechizado entre nosotros
5
Voy a abrir el cofre para encontrar
Tu cabello disperso es irresistible su
Apariencia revelada & el amor a lo
Lejos se recuerda candor transmigra
Ción respira en caricia nocturna una
Falda que se repliega ante la flexión
De tu pierna lo imprevisto de la can
Ción referencias encriptadas ademán
De tu risa creciente en los resquicios
De los escondites favoritos constancia
De amaranto bruñido rumor de tu
Deseo en el patio de la noche & en
Este poema que te escribo
6
Prístina imagen feliz de mi amanecer
Pétalos tan suaves son tu piel sere
Na en las primicias del día desciende
La luz por la claraboya & te adora
Igual que yo intacta la pureza de
Tu respiración mientras dormías &
Yo te contemplaba arrobado por
El zenith que se forma entre tus
Pliegues reunido con los astros del
Cielo paralelo de anhelos consuma
Dos antes del alba follaje de cier
Vos en el bosque más soñado
Pastoral rendido a tu tibieza ta
Lla la sombra en la que el sol se
Inclina misterio & límite tu si
Lueta recostada todavía ténue
Se posa troza limpia transfi
Guración santa de ti misma en
El poema