Presentamos tres poemas de Martín Rangel (Pachuca, 1994). Él es poeta, traductor y net-artist. Cursó estudios de Lengua y Literatura Hispánicas en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM. Es Licenciado en Filosofía egresado del Colegio de Estudios Superiores del Estado de Guanajuato. Autor de los libros de poesía ROJO (2013), El rugido leve: las canciones de Ryan Karazija (CECULTAH, 2015), emoji de algo muerto (Malos Pasos, 2015), delirioamateur (N.D. Editorial, 2016), al margen del mundo (Tiempo-que-resta Ediciones, 2017), Luna Hiena (ABLUCIONISTAS, 2020), bisiesto (Editorial Matrerita, 2021) y sometimes I write poems and sometimes I write poems (Trad. Lawrence
Schimel, Broken Sleep Books, 2021).
*Créditos de la fotografía: Hugo Chamorro, CCEmx
simulacro
al final el tiempo
hizo lo suyo
lo que sentimos
ha perdido intensidad
o hemos aprendido
a pretender
aprendimos
a quedarnos
en silencio
a contener
el grito
nos volvimos
expertos en el arte
de escondernos
(incluso de nosotros
mismos)
nadie nos mira llorar
mientras trabajamos
jornadas imposibles
para ganar
sueldos que no
son suficientes
tampoco reímos
y si lo hacemos
procuramos cubrir
con vergüenza
nuestras bocas
vestimos
el disfraz de adultos
hasta que llega la noche
y el desfile termina
durante un puñado de horas
mientras navegamos el sueño
somos por fin
todo aquello que no
tenemos permitido
sin embargo
el tiempo hace
lo que hace el tiempo
y la alarma nos avisa
de otro amanecer
de un nuevo simulacro inevitable
si muero joven
si muero joven
la gente que me aprecia hablará
de aquello que dejé inconcluso
y al revisar mis antiguos textos
desearán haber leído
aquel futuro libro que no existe
si muero joven
la gente que me desprecia
leerá los libros que sí existen
con una mueca de asco
y en silencio
pues está mal visto
hablar mal de quien ha muerto
si muero joven
los amigos de antes
lamentarán no haber estado
y dormirán abrazando a sus hijos
en una cama grande y cómoda
si muero joven
los amigos nuevos
borrachos y lanzando
golpes al cielo vacío
jugarán a alcanzarme
y del otro lado del aire
reiremos otra vez
de los mismos chistes
si muero joven
mi madre llorará
un llanto en apariencia inconsolable
y luego va a entender que el tiempo
aquello que no destruye
lo adelgaza
si muero joven
mi padre tatuará mi nombre
(que es nuestro)
en la zona más dolorosa de su cuerpo
y la piel sanará
mostrando otro mensaje
que nadie podrá leer
si muero joven
mi hermano pensará
que hice lo que pude
fumará y ofrendará el humo a las constelaciones
dibujará el mapa de un lugar
que sólo podrá
visitar en sueños
si muero joven
mi viuda
pasados unos días pensará
que siempre fui más
palabras que hueso y más voz
que carne
aunque quizás nunca lo diga
y no haría falta
porque si muero joven
todo
se volvería evidente
y cobraría por fin sentido
si muero joven
quizás despierte a la noción
de que la muerte solo es
una palabra más
que he podido escribir
como tantas otras
sobre un tema de Beckett
un fracaso más
la comida cruda o quemada
la ropa manchada de ceniza
los dientes amarillos
los zapatos sucios
el cabello despeinado
las ojeras
(ese no estar a la altura
de las circunstancias)
mentiras con las que me encontraré
del otro lado
palabras como escudos
refugios temporales
excusas y justificaciones
una pretendida espiritualidad
y la adicción a los espejos
en los que miro cada noche
un fracaso nuevo
siempre mejor que el anterior